Los equipos de A Vida dan forma a una de sus piezas más originales. La Mesa Comecocos luce hoy en proyectos de los arquitectos e interioristas más prestigiosos de España
Hay piezas que se piensan. Otras que se diseñan. Y luego están las que se sueñan, se intuyen, se provocan… Piezas que seducen por su audacia, su singularidad y su capacidad para transformar espacios. La Mesa Comecocos, una de las creaciones más originales de los equipos de A Vida y de MIL STUDIOS, pertenece sin duda a esta última categoría.
Inspirada en los emblemáticos personajes de uno de los videojuegos más influyentes del siglo XX, la Mesa Comecocos no es una pieza decorativa más: es un manifiesto estético, una declaración de intenciones. A través de su geometría orgánica —que alude con ironía elegante a la simpática silueta del legendario comecocos—, el equipo creativo de A Vida ha logrado cristalizar una idea profundamente contemporánea: la convivencia entre la memoria afectiva y el diseño de vanguardia.
Formalmente audaz y conceptualmente estimulante, la pieza se erige sobre materiales de altísima calidad, seleccionados con el rigor casi obsesivo que define cada uno de los procesos creativos y fabriles de A Vida. Texturas minerales, superficies con acabados táctiles, juegos de brillos y mates…
Mesa Comecocos, seducción desde la intuición
Todo en la mesa remite a una sofisticación silenciosa pero impactante. Una estética que seduce desde la intuición, que no necesita explicaciones porque se impone a través de la experiencia sensorial.
La Mesa Comecocos ha conquistado ya a algunos de los estudios de interiorismo y arquitectura más exigentes del país. Su presencia en una vivienda madrileña firmada por MIL STUDIOS, así como en otro espectacular proyecto en la Calle Fortuny de Madrid a cargo del prestigioso Tristán Domecq, demuestra no solo la versatilidad de la pieza, sino también su capacidad para dialogar con lenguajes arquitectónicos diversos, adaptándose con naturalidad tanto a espacios de inspiración clásica como a entornos minimalistas o brutalistas.
Más que un mueble, esta creación de A Vida es una pieza de conversación, un catalizador emocional que despierta memoria, deseo y curiosidad.
En un mundo saturado de objetos sin alma, la Mesa Comecocos se alza como un símbolo de originalidad y excelencia. Un guiño al pasado, sí, pero con una mirada descaradamente dirigida hacia el futuro.
