Dos Passos, un deleite para el paladar… y para la vista

A Vida participa en la creación del restaurante Dos Passos, en Madrid, una refrescante y original propuesta gastronómica

La restauración de hoy funde continente y contenido. Crea experiencias que permiten al visitante disfrutar con todos los sentidos. Un viaje que en el restaurante Dos Passos de Madrid han cuidado al detalle. Y en el que hemos colaborado muy activamente desde A Vida Group.

Una experiencia como la de Dos Passos, ecléctica, fresca y apta para todos los públicos, requería de una presentación a su altura. Y eso fue lo que llevó al Grupo Lalala (promotores del proyecto) a querido contar con el expertise de A Vida para llevar su propuesta gastronómica a otro nivel.

Nuestra amplia gama de acabados y atención por el detalle han dado pie a la creación de un establecimiento muy especial, situado en la Calle Princesa de Madrid, en el corazón de la capital. En él se combinan gastronomía, coctelería y música en directo para crear un conjunto exclusivo y original, aderezado con unos interiores modernos, sofisticados y de carácter universal, en los que A Vida ha dejado su impronta de la mano de nuestros artesanos.

La obra, realizada por Ani Construcciones en colaboración con el estudio de interiorismo Dpoch Studio y el grupo Sounds, revoluciona y reinventa los conceptos fundamentales de la cocina. En ese camino, hay un protagonismo muy especial para todos y cada uno de los elementos que configuran el local.

Vista de la original entrada del restaurante Dos Passos

Varios locales en uno

El proyecto ha hecho de la versatilidad una de sus señas de identidad. Para ello, ha creado distintos espacios, cada uno de ellos con su propia atmósfera y en los que degustar propuestas gastronómicas y bebidas con una clara vocación internacional.

Esa forma de pensar y de crear es la que ha conectado Dos Passos con A Vida Group. Con nuestras capacidades para dar forma a ideas ambiciosas, distintas.

Así, por ejemplo, para la zona de coctelería se apostó por un estilo urbano y desenfadado, con acabados y revestimientos en metal, cemento y ladrillo. Allí destaca la presencia de un imponente botellero de carácter industrial y una sobria barra acabada en un elegante color negro, todo con el sello de A Vida.

En el área de restauración, el protagonismo recae en buena medida en el trabajo en mimbre de nuestros artesanos, el cual le aporta al espacio calidez y comodidad. La imponente máscara que domina esta zona, así como la exquisita celosía que la recorre, le confieren al lugar un exotismo contemporáneo, que se hermana a la perfección con la multiculturalidad de la gastronomía de Dos Passos.

Cuando un restaurante tiene tanta personalidad y destila tan buen gusto, es un auténtico placer dejarse llevar y sumirse en su más dulce caos.